LAS PERLAS DE JUNIO Y JULIO

Thirty Years of HIV and AIDS: Future Challenges and Opportunities
CW Dieffenbach and AS FauciSilver

Tras tres décadas de infección por el VIH y la pandemia de SIDA cabe la esperanza de que llegue el momento del máximo control y la probable finalización de la misma. Los avances en el conocimiento de la fisiopatogena, tratamiento y prevención han sido extraordinarios y se ha revolucionado la virología moderna de finales del siglo XX y del inicio de la nueva centuria. Como bien narran los autores, investigadores inestimables por sus importantes contribuciones científicas y grandes “filósofos” en la materia, todos, y es verdad, TODOS (investigadores básicos, clínicos, personal sanitario, autoridades públicas y políticos, laboratorios privados, etc.) debemos y podemos contribuir a recorrer el camino para llegar al final de la pandemia de VIH/SIDA, fundamentalmente a través de tres líneas maestras y áreas clave: la identificación precoz y eficiente de individuos infectados por el VIH a través de pruebas voluntarias que permitan un inicio apropiado e inmediato del tratamiento antirretroviral (TAR), fármacos y productos terapéuticos que alcancen el objetivo de curación de la infección del VIH (p.ej., haciendo desaparecer el virus de los reservorios, bloqueando su entrada celular, vacunas, anticuerpos monoclonales, etc) y la prevención de nuevas infecciones. Todo ello en un magnífico artículo de revisión, compilación, actualización y sabia visión de la perspectiva histórica.


Decreased Antibiotic Utilization After Implementation of a Guideline for Inpatient Cellulitis and Cutaneous Abscess
TC Jenkins, MD; BC Knepper, MPH, MSc; AL Sabel, MD, PhD, MPH; EE Sarcone, MD; JA Long, MD, MPH; JS Haukoos, MD, MSc; SJ Morgan, MD; WL Biffl, MD; AW Steele, MD, MPH, MSc; CS Price, MD; PS Mehler, MD; WJ Burman, MD

De vez en cuando las Guías y pliegos de recomendaciones, hasta los consensos, sirven para algo. No todo iba a ser opinión de expertos disfrazada de medicina basada en la evidencia (¿o en la eminencia?). Sobre todo, las Guías son útiles para quien las necesita, las crea, las diseña, las recrea, las modifica, las mejora, y las aplica a sus enfermos con mezcla equiparable de rigor y de flexibilidad. Entonces, sirven incluso hasta para quien “las sufre”: nuestro paciente. En una patología tan frecuente en ambulatorios, servicios de urgencia y salas de hospitalización convencionales, como las infecciones de piel y tejidos blandos, en sus formas tan habituales de celulitis y de abscesos, este grupo de Denver nos muestra su experiencia al aplicar una guía consensuada interdepartamental en estos escenarios: reducción en el uso de pruebas microbiológicas, menos interconsultas internas, duración más corta de la antibioterapia (3 dias) y mayor ajuste en la selección del espectro de los antibióticos. Todo ello sin menguar la eficacia, con una tasa de fallo clínico del 7,7%, similar a la del grupo pre-intervención. La intervención se basa en la diseminación del conocimiento de la existencia de la Guía, en el desarrollo de un “set” de órdenes electrónicas de ingreso, en la campaña educacional y el periodo de auditoría y de feed-back con los líderes de grupos asistenciales. No está nada mal para tiempos de crisis, donde la Sanidad Autonómica de nuestras Comunidades casi no tiene para pagar la povidona yodada o la clorhexidina para limpiar y curar las heridas y se imponen los recortes y el ahorro. El artículo se acompaña en el mismo número de un reflexivo y complementario artículo editorial. Como siempre, un estudio de un único centro no es necesariamente reproducible en otros lugares, y habría que observar la solidez de la guía en determinados tipos de pacientes (muy graves, inmunodeprimidos, niños) y ante microorganismos no sospechados o esperados.


Cranberries vs Antibiotics to Prevent Urinary Tract Infections:A Randomized Double-blind Noninferiority Trial in Premenopausal Women
MAJ Beerepoot, MD; G Riet, MD, PhD; S Nys PhD; WM van der Wal, MSc; CAJM de Borgie, PhD; TM de Reijke, MD, PhD; JM Prins, MD, PhD; J Koeijers, MD; A Verbon, MD, PhD; E Stobberingh, PhD; SE Geerlings, MD, PhD .

No siempre los productos naturales y las intervenciones que colindan en la folk-medicina o medicina alternativa tradicional pueden demostrar sus potenciales efectos beneficiosos, sobre todo cuando se someten a ensayos de mayor rigor, mejor metodología científica y suficiente casuística, como este estudio del grupo holandés que compara el concentrado encapsulado de arándanos (agrios, supongo) con antibioterapia convencional (cotrimoxazol a dosis bajas) para la prevención de las infecciones del tracto urinario (ITU). Pese a las propiedades de la fructosa y de las proantocianidinas de tipo A que contienen los arándanos y que podrían inhibir la adherencia de las fimbrias P y de tipo 1 de E. coli a los receptores celulares del uroepitelio, en esta ocasión fue más efectivo el uso de dosis de 480 mg/día de cotrimoxazol para prevenir las ITU recurrentes de mujeres premenopaúsicas que las cápsulas de arándanos. Obviamente, a costa de pagar una factura llamativa en la aparición y desarrollo de resistencias a cotrimoxazol (aparte de un curioso fenómeno de co-resistencia a otras familias), afortunadamente con una rápida reversión. Aunque los diferentes productos basados en arándanos habían conseguido demostrar a los 12 meses de uso una reducción de casi el 40% en la incidencia de recurrencias de ITU, no habían sido comparados con grupos de intervención mediados por profilaxis estándar. Tampoco se conoce la eficacia precisa de estos productos en otros grupos de pacientes, que no sean mujeres con ITU recurrentes. No obstante, no por ello vamos a dejar de tomar un estupendo yogur con frutos rojos o una buena tarta de arándanos con queso. La botánica siempre nos ofrecerá una posible alternativa al estándar establecido.


Management of RSV infections in adult recipients of hematopoietic stem cell transplantation
JN Shah and RF Chemaly

Nadie niega que en esta década aparecieron y existieron el SARS asociado a coronavirus, la gripe aviar y en los últimos dos años la gripe A H1N1, con todo lo que conllevaron de preocupación y alarma social, de alertas sanitarias internacionales y, en diferentes grados y cifras, de afectación y mortalidad de pacientes, según cada entidad en sí misma. Estos virus han revolucionado el mundo científico y el político, y han dado alas y motivos de inquietud, así como cierta animosidad mayor de lo habitual en su trabajo, a epidemiólogos y preventivistas. Todos hemos vivido y atendido casos de gripe A en nuestra población, incluso en periodos de verano, y han fallecido pacientes jóvenes sanos, aparte de embarazadas, obesos e inmunodeprimidos. Como las meigas, haberlas las ha habido, aunque no siempre se hayan visto. Lo que si se ha evidenciado es la manipulación política de gobiernos y naciones, y de ciertos organismos sanitarios internacionales, creando una hipertrofia apocalíptica de la situación y sembrando miedos innecesarios, aparte de sobreactuaciones excesivas, costosas y muy caras en los centros de salud y en los hospitales. Nos hemos gastado mucho dinero y mucho tiempo en la Gripe A; veremos a medio y largo plazo si ello ha compensado. En el primer año, todo fue hiperbólico y desenfrenado, especialmente en el ámbito de medios audiovisuales y declaraciones políticas, con maluso de antivirales (oseltamivir) y empleo dubitativo de las vacunas. Este último año e invierno, nadie se ha acordado de la Gripe A; ¡¡ Ah, la crisis ¡!. Y la hemos tenido en nuestros pacientes ingresados, y en igual o mayor número, y más graves, y se han muerto. Nada en el Ministerio, nada en la prensa, nada en TV. Si esta actitud hipócrita y cínica ha pasado con la gripe A H1N1, ¿Qué iba a ser de los hermanos víricos respiratorios menores, como el parainfluenza, el metapneumovirus, y el virus respiratorio sincitial?. Probablemente no merecían ni dos columnas. Hagamos justicia, y al menos mentemos este magnífico artículo de dos autores de prestigio que trabajan en el famoso MD Anderson Cancer Center de Hosuton (Texas) sobre cómo entienden ellos el manejo de las infecciones por VRS en el complejo y muy inmunosuprimido colectivo de pacientes sometidos a trasplante de progenitores hematopoyéticos (TPH). En estos pacientes, muchas veces llegamos tarde y actuamos de forma impotente y mal. No disponemos de antivíricos eficaces y seguros (¿dónde está la investigación?), el desarrollo de vacunas está sumido en su laberinto y algunos anticuerpos monoclonales, como el palivizumab, no han trasladado su eficacia del grupo poblacional de lactantes a los enfermos hematológicos, neutropénicos, con o sin TPH. Por tanto, diagnóstico precoz, cuando la infección respiratoria aún se encuentra en el tracto superior y no ha descendido a bronquios, pulmones y alveolos. Y tratamiento precoz, ¿con qué?, con lo que podamos,…con lo que tengamos. Veamos que nos explican los Dres. Shah y Chemaly.


Severe 2009 A/H1N1v influenza in pregnant women in Spain
E Maraví-Poma, MD, PhD, HonProf, FCCS, ERC, FCCM; I Martin-Loeches, MD, PhD; E Regidor, MD; C Laplaza, MD; K Cambra, MSc, PhD; S Aldunate, MD; J Eugenio Guerrero, MD; A Loza-Vázquez, MD; E Arnau, MD; J Almirall, MD; L Lorente, MD, PhD; Á Arenzana, MD; M Magret, MD; R Reig Valero, MD; E Márquez, MD; N González, MD, PhD; J Francisco Bermejo-Martin, MD, PhD; J Rello, MD, PhD; Grupo Español de Trabajo de Gripe Grave A (SEMICYUC)

Revivir y reflexionar sobre la experiencia y los recuerdos de lo vivido en los últimos dos años respecto a la Gripe A en nuestro entorno. Siguiendo con los comentarios que hacíamos en el artículo anterior, relacionados con los virus respiratorios, en este trabajo se describe la información más trascendental del estudio prospectivo, observacional y multicéntrico que varios miembros del Grupo Español de Trabajo de la Gripe A Grave, pertenecientes a la SEMICYUC y coordinados por el Dr. J. Rello, publican sobre esta entidad en la población de mujeres en edad reproductiva que estaban embarazadas. Porque haberla (la gripe A H1N1), la ha habido; tal vez no en las proporciones y fatalidad que las agencias sanitarias predestinaron, pero sí en cuanto a exigirnos los mejor de nuestro conocimiento y entrega asistencial para todos y cada uno de los casos vividos. Y de los casos graves vividos en embarazadas, que requirieron ingreso en unidades de pacientes críticos, se desprenden mensajes y conclusiones tan evidentes como estridentes: Más de un 20% de mujeres en edad reproductiva admitidas en las UCI por infección causada por el virus influenza A H1N1 estaban embarazadas (50 de 234); la mortalidad fue del 14% en las pacientes embarazadas y el embarazo supuso un factor significativamente asociado con neumonía viral primaria. De ahí que en este subgrupo tan especial de pacientes fuera tan necesario recibir el tratamiento con oseltamivir lo más precozmente posible, antes de las 48 horas posteriores al inicio de los síntomas de gripe.  Y es que el embarazo, ¿no es una forma especial de inmunocompromiso?; ¿o tal vez el problema sea el post-parto inmediato, con el fenómeno paradójico de síndrome inflamatorio con reconstitución inmunológica?. Esperemos que el grupo de trabajo siga investigando y desgranando información y artículos, en esta fase de producción prolífica sobre la Gripe A que es fruto de la vasta experiencia acumulada, y puedan responder a estos y otros muchos interrogantes en esta población tan singular como en otros tipos de pacientes.


Diagnosis and treatment of digestive cryptosporidiosis in allogeneic haematopoietic stem cell transplant recipients: a prospective single centre study.
F Legrand, F Grenouillet, F Larosa, F Dalle, P Saas, L Millon, E Deconinck and PS Rohrlich

No todas iban a ser infecciones bacterianas, víricas o fúngicas en el trasplante de progenitores hematopoyéticos (TPH). De vez en cuando, los parásitos también existen. Este grupo francés de Besançon nos muestra su experiencia en criptosporidiasis digestiva en pacientes receptores de un alo-TPH. Esta enfermedad infecciosa parasitaria, aun siendo infrecuente, puede suponer un verdadero problema de manejo, al mimetizarse clínicamente con la enfermedad del injerto frente al huésped (EICH), cuyas opciones terapéuticas son diametralmente opuestas: en una, reducir el grado de inmunosupresión; en la otra, intensificarlo. Aunque sólo se produjo (y detectó) la criptosporidiasis en 5 de 52 pacientes con TPH y episodios de diarreas, los autores nos enseñan su experiencia diagnóstica con varias pruebas microbiológicas de menos a más complejas y costosas (microscopía óptica, inmunocromatografía y técnicas de PCR) y su actuación terapéutica con tratamiento combinado, a base de azitromicina y nitazoxanida (esta última no fácilmente disponible en nuestro medio). En los 5 pacientes con criptosporidiasis la media de linfocitos CD4+ era de 60/mm3, lo cual hace pensar en un comportamiento patógenico y clínico de la parasitosis muy similar al que ocurría al principio de la pandemia del SIDA en los años ochenta y principios de los noventa, en pacientes infectados por el VIH, en los cuales esta infección era característica de aquellos con recuentos de CD4+ < a 50-100/mm3. Por tanto, sea en el alo-TPH o en el paciente VIH, es evidente que la reconstitución y recuperación inmunológica constituyen elementos clave para el control de esta infección. En el artículo también se resaltan detalles interesantes, como el patrón estacional de la parasitosis y su posible infradiagnóstico debido a la dificultad de detección en fases asintomáticas. Bueno, pues habrá que pensar también en la criptosporidiasis ante un síndrome diarreico no diagnosticado y no controlado en pacientes inmunosuprimidos no-VIH.


Candida bloodstream infections in intensive care units: Analysis of the extended prevalence of infection in intensive care unit study
DH Kett MD; E Azoulay MD, PhD; PM Echeverria MD; JL Vincent MD, PhD, FCCM; for the Extended Prevalence of Infection in the ICU Study (EPIC II) Group of Investigators.

Artículo de gran relevancia en el mundo de la infección fúngica y de los cuidados de pacientes críticos, al presentar y ofrecer un cuadro pictórico muy detallado y de gran perspectiva en relación con la candidemia, trazando una foto-finish del momento actual. Si además los firmantes son primeros espadas en la materia, prestigiosos autores en el marco de la infección acontecida en unidades de cuidados intensivos (UCI) y líderes indiscutidos de multitud de documentos de  consenso y protocolos, se entiende que estamos ante una publicación de gran calado y proyección. En este escenario internacional de más de 1200 UCI de 76 países, con más de 14.000 pacientes reclutados en el estudio EPIC-II, 99 enfermos padecieron una candidemia, lo que arroja una prevalencia de casi 7 por cada 1.000 pacientes críticos. Pese a que el trabajo puede estar limitado por su propia metodología, al tratarse de un “corte de prevalencia” de 24 horas, añade una anotación de máximo interés y un punto de calidad muy estimable, al ofrecer y enfrentar los resultados de forma comparativa con los pacientes que tuvieron bacteriemia por grampositivos o por gramnegativos. En este retrato-robot se aprecia que la especie más frecuentemente aislada fue Candida albicans y que el tratamiento antifúngico más utilizado fue la monoterapia con fluconazol, lo cual llama ciertamente la atención, puesto que ya nos encontrábamos en el año 2007, en periodo de auge de las primeras candinas. Dada la alta mortalidad cruda de la candidemia (tanto en la UCI como la que destila posteriormente en el resto de estancia intrahospitalaria en los supervivientes iniciales) y el importante consumo de recursos sanitarios, es evidente que muchos de los esfuerzos en investigación para mejorar el diagnóstico y el tratamiento de esta entidad se encuentran plenamente justificados. El mismo número de la publicación guarda un interesante comentario editorial de Peter G. Pappas que analiza el artículo y entona una reflexión acerca de que, pese al paso del tiempo, no ha cambiado tanto la historia natural de la candidemia y la candidiasis invasora.


A prospective comparison of galactomannan in bronchoalveolar lavage fluid for the diagnosis of pulmonary invasive aspergillosis in medical patients under intensive care: comparison with the diagnostic performance of galactomannan and of (1fi 3) – b – D-glucan chromogenic assay in serum samples
J Acosta, M Catalán, A del Palacio-Pérez-Medel, D Lora, JC Montejo, MS Cuétara, MD Moragues, J Pontón, A del Palacio

Gran aportación la de este trabajo de investigación de los grupos micológicos de Madrid y del País Vasco, dando a conocer sus resultados de incremento en el rendimiento diagnóstico de la infección fúngica invasora pulmonar mediante dos pruebas microbiológicas no basadas en el cultivo: el antígeno galactomanano (GM) de Aspergillus y la prueba de beta-D-glucano (BG). La novedad en el enriquecimiento del saber científico que consiguen radica en dos importantes detalles: uno, al demostrar que la prueba de GM realizada en muestras respiratorias profundas, como el lavado broncoalveolar, posee una mayor seguridad diagnóstica de neumonía fúngica (aspergilosis invasora, en concreto) que la misma prueba o la del BG en suero; dos, ambas pruebas (GM y BG) son capaces de adelantar el diagnóstico de aspergilosis en algo más de 4 días, respecto a las técnicas de cultivo para detección e identificación de Aspergillus, lo cual es muy relevante cuando una de las claves en el resultado favorable del tratamiento antifúngico es su inicio lo más precozmente posible. Si además, toda esta entusiasta e interesante contribución se enmarca en el escenario del paciente crítico, sobre el cual teníamos un menor conocimiento respecto a lo aprendido en el paciente hematológico neutropénico o inmunosuprimido, bienvenido sea el artículo. Y pongámoslo en práctica,…si podemos, dado que no son muchos los centros nacionales con acceso a la prueba de BG, pero sí cada vez más aquellos con implantación del GM. No solo en suero, ahora también en el lavado broncoalveolar. Sirva asimismo la publicación para rendir un homenaje y hacerle un venerado recordatorio a nuestro amigo y compañero el Dr. J. Pontón, firmante del trabajo, que falleció hace ahora un año, impulsor prestigioso, maestro reconocido y pedagogo nato en la investigación micológica en España.


 

Low-density lipoprotein receptor genotyping enhances the predictive value of IL28B genotype in HIV/hepatitis C virus-coinfected patients
JA Pineda, A Caruz, FA Di Lello, A Camacho,  P Mesa, K Neukam, A  Rivero-Juárez, J Macias,  J Gómez-Mateos, A Rivero

¡! Cómo avanzan los tiempos, los genotipos y el genotipado,…que es una barbaridad ¡!. ¡! Y cómo están los andaluces, que se lo guisan y se lo comen todo !¡. De nuevo: impresionantes. Una vuelta de tuerca más, y con lo que han ido comunicando en el último año sobre la IL-28B y la respuesta viral sostenida (RVS) del VHC en pacientes coinfectados por el VIH, si aparte del genotipo favorable en el genotipado de la IL-28B, posees un genotipo favorable en el gen del receptor de la lipoproteína de baja densidad (LDLR), la asociación de ambos aún mejora la tasa de RVS al tratamiento establecido de la infección crónica por el VHC, con interferón pegilado y ribavirina. Y después, vienen las distintas tasas de respuesta virológica a merced de todas las combinaciones de variantes genotípicas posibles de ambos genes (IL-28B y LDLR) en la determinación de sus polimorfismos genéticos (SNP). Cada vez observamos con mayor certidumbre que ya nacemos condicionados tal vez a padecer con más facilidad determinados tipos de infecciones, y no sólo eso, sino que tal vez también estamos predestinados a tener respuestas diferentes, en eficacia y tolerancia, a la terapéutica farmacológica de esas determinadas infecciones, como vemos puede ser el caso de la hepatitis por VHC. No sólo dependemos del genotipo del VHC (1-4, 2-3) sino también de nosotros mismos, como huéspedes, con su ontogenia y filogenia. Por consiguiente, como concluyen los autores, es posible que el uso combinado de ambos genotipos pudiera mejorar en la práctica clínica rutinaria el valor predictivo de respuesta viral de uno sólo de ellos, dado que ambos tienen un efecto sinérgico sobre la RVS.


Incidence and Outcomes of Ganciclovir-Resistant Cytomegalovirus Infections in 1244 Kidney Transplant Recipients
HA Myhre, DH Dorenberg, KI Kristiansen, H Rollag, T Leivestad, A Åsberg, and A Hartmann.

Aunque no todos los centros trasplantadores en nuestro país tienen implantadas de rutina técnicas para detección de mutaciones puntuales de resistencia a ganciclovir por parte de las cepas de citomegalovirus (CMV) humano que infectan a sus pacientes inmunosuprimidos, especialmente el grupo de trasplantados, la resistencia a este antiviral es una realidad, como demuestran los autores de este grupo investigador noruego. Aunque el porcentaje de mutaciones de resistencia a ganciclovir es bajo, cercano al 2%, en esta larga serie de pacientes trasplantados renales (más de 1000), es posible que éste tipo de resistencia sea el precio a pagar por aventurarse en estrategias de tratamiento anticipado frente a CMV. No obstante, este fenómeno de la resistencia tal vez sería más propio y frecuente en aquellos grupos de trasplantados en los que se opta por otras estrategias, como la de profilaxis frente a CMV, en los cuales la aparición de enfermedad tardía, con o sin resistencia al fármaco, se ha ido constituyendo en los últimos años como un hecho que merece cada vez mayor atención y vigilancia para el clínico que asiste a estos enfermos. Todas las mutaciones de resistencia detectadas en este estudio fueron en el gen UL97, por ninguna en el UL54. Este aspecto es muy relevante, dado que las mutaciones en el gen UL97 afectan a ganciclovir por estar implicadas en la monofosforilación inicial del fármaco, mientras que las que afectan al gen UL54 permiten la codificación de resistencia cruzada a otros antivirales, como cidofovir y foscarnet, al alterar la polimerasa viral, lo cual impediría el rescate de este tipo de casos de resistencia. Otros hallazgos son ya mejor conocidos y esperados: como la mayor presencia de la resistencia en el emparejamiento Donante+ / Receptor (-) para CMV, la necesidad de reducir las dosis de micofenolato y una duración de la DNAemia de CMV más corta en los tratados con foscarnet. Como en todo juego de la balanza de la inmunosupresión, los autores también comunican casos cuya viremia fue controlada sólo con la reducción de la intensidad de los inmunosupresores aunque continuaran con valganciclovir. Vistas las conclusiones, parece conveniente que nuestro laboratorio de biología molecular pueda estudiar en casos seleccionados la posibilidad de existencia de mutaciones de resistencia en CMV. ¿No lo hacemos ya con el VIH, VHB, y algunos otros?.


Fidaxomicin versus Vancomycin for Clostridium difficile Infection
TJ Louie, M.D., MA Miller, M.D., KM Mullane, D.O., K Weiss, M.D., A Lentnek, M.D., Y Golan, M.D., S Gorbach, M.D., P Sears, Ph.D., and YK Shue, Ph.D., for the OPT-80-003 Clinical Study Group*.

Por fin van apareciendo más alternativas para el tratamiento de la infección enterocolítica causada por Clostridium difficile, tan dispar e irregular en frecuencia y modo de presentación, según qué centros hospitalarios. Aunque el artículo que presenta este ensayo clínico comparativo entre fidaxomicina frente a vancomicina es de una hornada y tiempo de hace ya varios meses, lejanos a este periodo veraniego, las cartas al director y otros comentarios que ha generado se han ido extendiendo hasta hace muy poco. Casi os animo a leer no solo el estudio sino la literatura sucesiva que se ha ido entrelazando. Comentarios de todo tipo, sobre la metodología del ensayo, el análisis de resultados, la estadística, la bondad del nuevo fármaco, experiencias mejores, otras peores, que si el tipo de población, que la gravedad mayor o menor, que si las cepas con toxina binaria, que si la resistencia a antibióticos, que si las resinas quelantes (como el tolevamer) que si las recurrencias, que si el megacolon ,…etc. Se ha ido encendiendo la mecha. Y es que no podemos olvidar que la diarrea por C. difficile se ha ido convirtiendo en los países desarrollados en la primera causa de diarrea en adultos. Conlleva una elevada morbilidad y mortalidad, con alargamientos de estancias hospitalarias, riesgos de trasmisión nosocomial y grandes costes económicos. Y además presenta una elevada tasa de recurrencias, que es el aspecto más diferencial y subrayable de este ensayo, dado que la fidaxomicina alcanzó unas tasas menores de recurrencia de la infección, respecto a la vancomicina oral. Con las elevada tasas de recurrencia descritas, próximas al 20-30%, no es de extrañar que se evalúen otras estrategias de tratamiento, tales como la reposición de la flora autóctona del colon, nuevos antibióticos, el empleo de inmunoglobulinas y anticuerpos monoclonales bloqueadores de las toxinas específicas y la inmunización activa. La gravedad de la infección y la tasa de recurrencias dependen en parte de factores propios del paciente y de otros de la bacteria. La cepa NAPF1es la que presenta una mayor tasa de recurrencias. Desde un punto de vista teórico un antibiótico clínicamente eficaz frente a C. difficiledebiera ser activo in vitro frente a C. difficile, tener un espectro reducido sin actividad frente a otros comensales colónicos, ser tolerable por vía oral y no absorbible. La fidaxomicina es un derivado macrólido que cumple con estos requisitos a priori, por lo que no es de extrañar que se haya utilizado en este ensayo para buscar alternativas más eficaces y seguras a lo actual. Este estudio demuestra que la fidaxomicina no es inferior a vancomicina en la tasa de curación inicial y que la tasa de recurrencia en las 4 semanas siguientes es menor, con un perfil de tolerancia semejante. Sin embargo, la disminución de la tasa de recurrencias se demuestra sólo en aquellos pacientes infectados con cepas no NAP1. Es una lástima que no se haya hecho un seguimiento más prolongado, de 60 días, para comprobar si en este período persiste aún la superioridad, ya que muchos estudios han evidenciado una elevada tasa de recurrencias a los dos meses de finalizar el tratamiento. No obstante, démosle la bienvenida al arsenal terapéutico frente a C. difficile.


Use of a Simple Criteria Set for Guiding Echocardiography in Nosocomial Staphylococcus aureus Bacteremia
AJ Kaasch, VG Fowler, Jr., S Rieg, G Peyerl-Hoffmann, H Birkholz, M Hellmich, WV Kern, and H Seifert

¿Hacer o no hacer la “ecocardio?…Esa es la cuestión. Y además, ¿porqué hacerla? y ¿cuándo es el mejor momento de realizarla?. Especialmente si nos situamos en el epicentro de un episodio de bacteriemia nosocomial causado por S. aureus, tal como plantea este potente y reconocido grupo investigador alemán de Colonia y Friburgo, a su vez acompañado nada más ni nada menos que por Vance G. Fowler, de la Universidad de Duke en Carolina del Norte, que lo ha escrito (casi) todo sobre bacteriemia y endocarditis. Los autores ofrecen un pliego de criterios asequibles y sencillos para conseguir responder a las preguntas planteadas. Sobre todo cuando se trata de realizar un ecocardiograma transesofágico que podría ser tal vez prescindible, ahorrando molestias al paciente y optimizando recursos y tiempos hospitalarios. El ecocardiograma transesofágico no siempre está disponible ni accesible con inmediatez, se puede asociar con complicaciones, reviste algún incordio para el paciente y no deja de tener un cierto coste. Las principales dudas de llevarlo a cabo se plantean cuando una bacteriemia nosocomial por S. aureus, tal vez relacionada con un catéter vascular, asocie o no una endocarditis infecciosa, asunto que cambiaría, entre otros detalles importantes, la misma duración de la antibioterapia apropiada. Pues nada, mirad a ver si os convencen u os son útiles los criterios ofertados en este trabajo para discriminar la necesidad de practicar o no el ecocardiograma transesofágico: bacteriemia prolongada (> 4 días de duración), dispositivo intracardiaco permanente, hemodiálisis, infección de raquis u osteomielitis. Y no os perdáis ni dejéis de leer el magnífico editorial de opinión crítica que al respecto de este tema escriben nuestros amigos y compañeros, J. Mensa y A. Soriano, en el mismo número de la revista. Es visionario, inteligente y no tiene desperdicio. ¡¡ Ánimo!!.

LAS PERLAS DEL MES DE MARZO

Challenges of Antibacterial Discovery
LL Silver

Artículo de revisión que enumera y lista las posibilidades futuras de distintas moléculas en fases incipientes de investigación; en un mundo donde cada vez se producen menos antibacterianos frente al desarrollo y expansión de más microorganismos multirresistentes, conviene conocer que familias de fármacos nos podrán ser útiles. Como siempre, muchos serán los llamados y pocos los elegidos.


EDITORIAL
A New Era of Hepatitis C Therapy Begins
DM Jensen

Editorial que acompaña a dos artículos pioneros en el mismo número del NEJM conteniendo los estudios pivotales de un nuevo inhibidor de la proteasa, boceprevir, para el tratamiento de la hepatitis por VHC. Ambos estudios incluyen pacientes con genotipo 1 del VHC, diferenciándose entre ellos en que los pacientes hayan sido previamente tratados o no. Se abre una esperanza en el mundo del tratamiento de las hepatitis virales crónicas, aunque por el momento no se podrá prescindir del interferón/ribavirina.


Serotypes and genotypes of Streptococcus pneumoniae causing pneumonia and acute exacerbations in patients with chronic obstructive pulmonary disease
A Domenech, C Ardanuy, L Calatayud, S Santos, F Tubau, I Grau, R Verdaguer, J Dorca, R Pallares, R Martin and J Liñares.

Contribución valiosa en el conocimiento de la enfermedad neumocócica por parte del experto y productivo grupo del Hospital de Bellvitge (Barcelona/España), todo un referente desde hace décadas. La aportación actual se centra en pacientes con EPOC/OCFA y traduce la experiencia de serotipos y genotipos en la neumonía y en las exacerbaciones agudas de estos enfermos con neumopatía estructural.


Decreased Infection-Related Mortality and Improved Survival in Severe Aplastic Anemia in the Past Two Decades
JM Valdez, P Scheinberg, O Nunez, CO Wu, NS Young, and TJ Walsh.

Por fin comienza a disminuir la mortalidad de origen infeccioso en pacientes hematológicos con grave anemia aplásica. Gran parte de la mejora conseguida parece deberse a una reducción en la frecuencia de enfermedad fúngica invasora y a un mejor control de la misma, con descenso de la mortalidad relacionada con micosis invasoras. Parece que los nuevos antifúngicos llegados en la última década han tenido mucho que ver, y sobre todo, voriconazol ha jugado (y juega) un gran papel en esta “hazaña”.


Pathogenesis of Progressive Multifocal Leukoencephalopathy—Revisited
MK White and K Khalili.

Exposición de las nuevas evidencias sobre la patogénesis de la PML, los mecanismos de latencia y de reactivación del poliomavirus JC en distintos tipos de huéspedes inmunosuprimidos, pasados por el filtro de las hipótesis de dos autores esenciales en el conocimiento de esta enfermedad desmielinizante del SNC.


Q Fever in France, 1985–2009.
D Frankel, H Richet, A Renvoisé, and D Raoult.

Puesta en perspectiva de la infección por Coxiella burnetti causante de la Fiebre Q por parte de uno de los grupos de investigación más prestigiosos internacionalmente en zoonosis y en el descubrimiento de nuevos patógenos intracelulares: el grupo de Marsella liderado por el Profesor Didier Raoult. Esta es otra de sus contribuciones valiosísimas, analizando las características epidemiológicas, estacionales, serológicas y clínicas de las formas agudas y crónicas (endocarditis) de fiebre Q.


A novel method for the rapid and prospective identification of Beijing Mycobacterium tuberculosis strains by high-resolution melting analysis
M Alonso, Y Navarro, F Barletta, M Martínez Lirola, E Gotuzzo, E Bouza, D  García de Viedma.

En la lucha contra la tuberculosis, todos los esfuerzos y mejoras son bienvenidos, procedan del campo diagnóstico o del área del tratamiento específico con nuevos fármacos. Ante cepas de Mycobacterium tuberculosis con alta virulencia y fácil transmisibilidad, como la Beijing, los métodos de diagnóstico más rápidos y eficientes, basados en modernas técnicas de detección de ácidos nucleicos, pueden aportar una herramienta de ayuda con valor inestimable. Precocidad diagnóstica es sinónimo de control, prevención y curación. Esperemos que algún día se acerquen a la erradicación.


Treatment and outcomes in carbapenem-resistant Klebsiella pneumoniae bloodstream infections.
EA Neuner, J Yeh, GS Hall, JSekeres, A Endimiani, RA Bonomo, NK Shrestha, TG Fraser, D van Duin.

Enemigos cada vez más sofisticados y complejos, mejor preparados y más resistentes, como estas cepas de Klebsiella pneumoniae, frente a las cuales casi no nos quedan opciones eficaces en el armamentarium de los antimicrobianos. Alta mortalidad y elevada tasa de reingresos en la bacteriemia de este bacilo gramnegativo multirresistente según el grupo de Cleveland, pese a las alternativas aún disponibles: tigeciclina, colistina y algún aminoglucósido ocasionalmente. Es evidente que necesitamos nuevos antibióticos, que han llegado ya frente a grampositivos en esta última década, pero de los que carecemos frente a gramnegativos. Un desierto desolador.


Effect of immunomodulatory therapies in patients with pandemic influenza A (H1N1) 2009 complicated by pneumonia.
D Viasus, JR Paño-Pardo, E Cordero, A Campins, F López-Medrano, A Villoslada, MC Fariñas, A Moreno, J Rodríguez-Baño, JA Oteo, J Martínez-Montauti, J Torre-Cisneros, F Segura, J Carratalà and for the Novel Influenza A (H1N1) Study Group of the Spanish Network for Research in Infectious Diseases (REIPI).

Seguimos aprendiendo de los nuevos virus gripales, especialmente del virus de la gripe A H1N1, que tanto dio que hablar en la calle, en los medios audiovisuales y entre los políticos. Más allá de protagonismos histéricos y estériles, es el momento de hablar de los científicos con una producción fructífera. El grupo español de la RED REIPI en enfermedades infecciosas nos ilustra en un determinado aspecto de la neumonía gripal por el H1N1, y con una muestra numéricamente nada despreciable, observamos como las terapias inmunomoduladoras (corticoides, macrólidos y estatinas) no tuvieron poder protector en el desarrollo de complicaciones o de enfermedad grave.


Clinical factors associated with a Candida albicans Germ Tube Antibody positive test in Intensive Care Unit patients.
Pemán J, Zaragoza R, Quindós G, Alkorta M, Cuétara MS, Camarena JJ, Ramírez P, Giménez MJ, Martín-Mazuelos E, Linares-Sicilia MJ, Pontón J; the study group Candida albicans Germ Tube Antibody Detection in Critically Ill Patients (CAGTAUCI).

Precocidad y mayor certeza diagnóstica es una inversión en la mejora del pronóstico de la infección fúngica invasora, caso de la candidemia y candidiasis invasiva en el contexto del paciente crítico. Este grupo español de micólogos y clínicos sigue desarrollando y mejorando su técnica, la detección de anticuerpos anti-micelio de Candida, identificando ahora la cirugía y otros factores con un resultado positivo de la prueba, con independencia del estado de colonización o del uso previo de antifúngicos. Con todo lo que ya han publicado en esta línea, si hubiera sido una patente americana, en vez de un producto nacional, serían más ricos y famosos de lo esperado. Así es el mundo y así se escribe la historia, incluso la científica


Pneumocystis jirovecii colonization in patients treated with infliximab.
Wissmann G, Morilla R, Martín-Garrido I, Friaza V, Respaldiza N, Povedano J, Praena-Fernández JM, Montes-Cano MA, Medrano FJ, Goldani LZ, de la Horra C, Varela JM, Calderón EJ.

El grupo de Sevilla, liderado por el Dr. EJ. Calderón, lleva cerca de 20 años y más de 40 artículos publicados de investigación exquisita, prolífica y puntera en el mundo del Pneumocystis. Aparte de conocerlo bien, y de tener una línea de cultivo especial para este hongo levaduriforme, así como haber desarrollado modelos experimentales y métodos específicos de estudio de la sensibilidad o resistencia de Pneumocystis a los fármacos de primera línea (cotrimoxazol) y alternativos, este grupo investigador ha descrito hallazgos y fenómenos tan relevantes como: la existencia de diversos polimorfismos de cepas y su caracterización genética, el valor de los lavados orofaríngeos en la detección de portadores, el papel del análisis metagenómico en el lavado broncoalveolar, las variaciones geográficas en respuestas serológicas, la transmisión desde portadores sanos a diferentes grupos de pacientes, los reservorios humanos junto al perfil de colonización dinámica e incluso de transmisión vertical, la colonización e infección en pacientes con broncopatía crónica obstructiva, neumopatía intersticial o con fibrosis quística y, por último, la presencia del patógeno en poblaciones con edades extremas (niños/ancianos) de la vida o en pacientes inmunodeprimidos no-VIH.
En este último apartado cabe el artículo que referenciamos sobre colonización por Pneumocystis jirovecii en pacientes tratados con uno de los fármacos inhibidores del TNFa más potentes, el infliximab. Los autores determinan que el subgrupo de enfermos reumatológicos con uso de infliximab durante más de 3 años y/o con empleo de corticoides (sin precisar duración o dosis para estos últimos) tenían un riesgo más alto de colonización de forma significativa. Es evidente que este hallazgo puede tener trascendencia para aplicar estrategias de profilaxis primaria frente a Pneumocystis en este escenario.


Clinical management of Staphylococcus aureus bacteriaemia.
GE Thwaites, JD Edgeworth, E Gkrania-Klotsas, A Kirby, R Tilley, ME Török, S Walker, HFL Wertheim, P Wilson, MJ Llewelyn, for the UK Clinical Infection Research Group.

Mediante un guión previamente diseñado y estructurado con preguntas y respuestas, todas ellas relevantes y de interés, los autores responden desde su experiencia y criterio a varias cuestiones clave en el manejo de la bacteriemia grave por S. aureus. El lector podrá encontrar enfoques comprometidos y pragmáticos, sobre los que se ha intentado proyectar un sentido práctico. No obstante, quedan bastantes detalles sin respuestas definitivas y un campo abierto de varias líneas de investigación, en una entidad infecciosa tan atractiva, como respetuosa y bastantes veces letal.

LAS PERLAS DEL MES DE MAYO

How I treat mucormycosis
DP Kontoyiannis, RE Lewis

Artículo de opinión y de revisión que nos guía en el manejo de las zigomicosis/mucormicosis de la mano de dos expertos internacionales muy reconocidos y líderes en la investigación sobre enfermedad fúngica invasora (EFI), diagnóstico de las micosis y nuevos enfoques terapéuticos. En el trabajo encontrareis todo aquello que desde la experiencia previa ha quedado como esencial, lo que hemos aprendido, lo que podemos ya implementar (papel de las formulaciones lipídicas, uso de posaconazol, combinaciones de antifúngicos) y lo que vendrá en el futuro inmediato para manejo de esta EFI tan poco frecuente (afortunadamente) como letal (60-90% de mortalidad) e inmisericorde (desgraciadamente). Entre todos, hemos de mejorar su pronóstico y la supervivencia de los pacientes afectados por la misma.


Rituximab-Associated Progressive Multifocal Leukoencephalopathy in Rheumatoid Arthritis
DB Clifford, B Ances, C Costello, S Rosen-Schmidt, M Andersson, D Parks, A Perry, R Yerra, R Schmidt, E Alvarez, KL Tyler.

Si ya sabíamos y aceptábamos que este fármaco (rituximab) con actividad de bloqueo del receptor CD-20 de los linfocitos B estaba relacionado con el riesgo de desarrollo de Leucoencefalopatía Multifocal progresiva (LMP) por el poliomavirus JC en pacientes oncohematológicos, especialmente en enfermos con linfomas y otros síndromes linfoproliferativos, con este estudio ahora podemos dar un salto a otro grupo nada desdeñable de enfermos, aquellos con enfermedades autoinmunes inflamatorias crónicas, como la artritis reumatoide, donde el empleo de este agente biológico puede aumentar el riesgo de esta complicación infecciosa neurológica desmielinizante de curso rápidamente fatal. Habrá que estar atento a qué subgrupo de enfermos detentan un mayor riesgo de LPM y cómo diagnosticarla precozmente. Un ratio de 1 caso/25.000 individuos no es en absoluto una cifra despreciable.


Pathogenesis of implant-associated infection: the role of the host
W Zimmerli, P Sendi

Magnífico artículo de revisión y actualización futurista por parte del afamado grupo suizo liderado por W. Zimmerli sobre la fisiopatogenia de las infecciones asociadas a dispositivos biomédicos y cuerpos extraños implantables. Después de bucear en todas las etapas de formación y desarrollo del biofilm (biopelículas), de ayudarnos a comprender el papel del quórum-sensing, de las variantes de pequeñas colonias, y otros mecanismos de virulencia y patogenicidad de las bacterias, nos adentran en los confines de la nanotecnología y del recubrimiento de superficies con sustancias biocompatibles revulsivas a la infección como elementos claves del futuro arsenal terapéutico en este tipo de infecciones de corte nosocomial tan complejas como recalcitrantes en muchas ocasiones. Dispositivos inteligentes para mentes abiertas.


The impact or prebiopsy antibiotics on pathogen recovery in hematogenous vertebral osteomyelitis
J Marschall, KP Bhavan, MA Olsen, VJ Fraser, NM Wright and DKWarren

A ver si tanto tiempo parando el tratamiento antibiótico previamente a la práctica de biopsias y toma de muestras profundas de hueso para el diagnóstico etiológico de la infección osteoarticular con el fin de mejorar el rendimiento, no sirve de mucho o no incrementa de forma llamativa la rentabilidad de los cultivos microbiológicos, según lo que se desprende de los resultados y conclusiones de este estudio del grupo de St. Louis (Missouri). Al menos, en lo que respecta para la osteomielitis vertebral de origen hematógeno. La serie es retrospectiva pero cuenta con 150 pacientes, de los cuales son biopsiados el 60% y se recupera un microorganismo en el 66% de los mismos (61/92). En cualquier caso, una de las conclusiones es casi evidente y lógica: las biopsias “a cielo abierto” ganaron en rentabilidad diagnóstica a las biopsias “ciegas”.


Complementary role of vitamin D deficiency and the interleukin-28B rs12979860 C/T polymorphism in predicting antiviral response in chronic hepatitis C
D Bitetto, G Fattovich, C Fabris, E Ceriani E, E Falleti, E Fornasiere ,  M Pasino, D Ieluzzi, A Cussigh, S Cmet, M Pirisi, P Toniutto

“Todo vale” con el fin de ganarle la partida al virus de la hepatitis C (VHC) causante de tantos casos de hepatitis crónica, cirrosis hepática y evolución a hepatocarcinoma en el mundo actual y en el tiempo presente. Lo que parecía proceder de una galaxia lejana, hoy ya está al alcance de nuestra práctica clínica cotidiana. Podemos mejorar las tasas de respuesta viral sostenida (RVS) en el tratamiento del VHC con la detección previa de una potencial deficiencia de vitamina D (sobre la que podemos intervenir con suplementos pre-tratamiento de 25-OH-Vitamina D) y el conocimiento de los polimorfismos genéticos C/T de la IL-28B. Son los nuevos predictores de respuesta que este pionero y afamado grupo de investigación italiano avalan hoy en día, especialmente en genotipos refractarios y resistentes al  tratamiento antiviral en situación “naïve”, donde ambos parámetros pueden tener un valor complementario. ¿Y se podrá extrapolar todo ello a la situación de coinfección con el VIH?


Advances in pneumococcal disease prevention: 13-valent pneumococcal conjugate vaccine for infants and children
PR Paradiso

Artículo de “invitado” para recapitular sobre los avances alcanzados en el área de vacunas, especialmente sobre la vacuna 13-valente conjugada frente a neumococo en población pediátrica, que atiende uno de los principales investigadores del grupo farmacéutico Pfizer. Aunque uno podría creer que los conflictos de interés del autor (los cuales son declarados al final del manuscrito) podrían pesar sobre la independencia científica y la línea argumental del mismo, no es así. Inmunogenicidad y seguridad son dos de los aspectos mejor atendidos  en este trabajo. Se agradece, en un mundo en crisis económica, de investigación y de identidad, que podamos guardar esperanzas con esta nueva vacuna para prevenir y combatir la enfermedad neumocócica invasora, tan frecuente y con tanta morbimortalidad asociada en los niños (neumonías, meningitis, otitis, bacteriemia y sepsis). Esperemos que la ampliación de esta cobertura vacunal eficaz frente a muchos más serotipos de neumococos, de entre los circulantes con mayor prevalencia, se pueda extender también pronto a los grupos de población adulta e inmunocomprometida que tanto la necesitan.


XMRV, prostate cancer and chronic fatigue syndrome
JC Kenyon, AML Lever

Tras este artículo crítico y riguroso de revisión y otros tantos originales de investigación básica precedentes, podemos aceptar que, tras todo lo que se ha hablado y escrito en los últimos años sobre este gammaretrovirus,  en el momento actual no parece confirmarse que el XMRV (virus xenotropo relacionado con el virus de la leucemia murina) sea el agente etiológico del Síndrome de Fatiga Crónica (SFC) o del cáncer de próstata. Por tanto, se desvanece el posible beneficio derivado de este hallazgo, incluyendo el desarrollo de pruebas diagnósticas y la puesta a punto de antivíricos más o menos específicos. El propio XMRV, que sin lugar a dudas existe, puede que no sea más que una anécdota en patología humana dentro de unos pocos años. La respuesta definitiva en gran medida vendrá dada por el diseño de pruebas diagnósticas sensibles, específicas y reproducibles, que son un requisito indispensable para conocer el grado de diseminación del virus y elucidar sus mecanismos de transmisión. Su posible implicación en patología humana también deberá esperar a ese momento.


Emergence of daptomycin resistance following vancomycin-unresponsive Staphylococcus aureus bacteraemia in a daptomycin-naïve patient—a review of the literature
SJ van Hal, DL Paterson, IB Gosbell

Desafortunadamente, la historia de los antimicrobianos es la historia de la resistencia. Aquí no se salva nada ni nadie. Ninguno es eterno. Antes o después, más o pronto o más tarde, cualquier molécula con poder antimicrobiano puede perder su actividad frente a los patógenos clásicos más prevalentes, se haya producido, o no, el fenómeno de exposición entre microorganismo y antibiótico. Es el caso de lo descrito por los autores australianos con respecto a una cepa de Staphylococcus aureus resistente a cloxacilina causante de bacteriemia de foco osteoarticular que desarrolló resistencia a daptomicina, pese a ser “virgen” en su relación con este lipopéptido. Este hecho les incita a explorar el fenómeno de la pérdida de sensibilidad de S. aureus a daptomicina y analizan los casos y series comunicados con anterioridad, y su relación con los fenotipos de resistencia a vancomicina (heteroresistencia, resistencia intermedia, etc.). Por último, explican y apoyan la teoría del incremento progresivo en el grosor de la pared celular de la bacteria como mecanismo de aparición de este tipo de resistencia, el cual debería monitorizarse incluso sin el antecedente de exposición a daptomicina, con el fin de prevenir el fracaso terapéutico según los autores.


Recommendations for management of Chagas disease in oran and hematopoietic tissue transplantation programs in nonendemic areas
MJ Pinazo, B Miranda, C Rodríguez-Villar,  J Altclas, MB Serra ,  EC García-Otero ,  EA de Almeida, M de la Mata García,  J Gascon ,  MG Rodríguez,  N Manito,  AM Camacho, F Oppenheimer, SP Puente, A Riarte, JS Coronas, MS Lletí, GF Sanz, F Torrico, DT Tendero, P UssettI, M Shikanai-Yasuda

Documento multidisciplinar de un grupo variado de especialistas españoles y latinoamericanos procedentes del campo de las enfermedades infecciosas, la medicina tropical y del viajero, la microbiología y parasitología, el mundo del trasplante y la oncohematología. Tras dos años de preparación y discusión del trabajo, el pliego de recomendaciones consensuadas viene a cubrir un hueco hasta ahora un tanto vacío respecto al manejo de la enfermedad de Chagas en los programas de trasplante de órganos, tejidos y progenitores hematopoyéticos. En este mundo en que vivimos de “La Aldea Global” debemos tener conocimiento y estar preparados de cómo detectar y afrontar la infección por Trypanosoma cruzi tanto en el donante como en el receptor. Esperamos que el documento sea útil para aquellos que dirigen su actividad asistencial hacia estos campos del trasplante en áreas no endémicas.


Update on Strongyloidiasis in the immunocompromised host
LA Marcos, A Terashima, M Canales, E Gotuzzo

Liderados por el prestigioso Profesor peruano, el Dr. E. Gotuzzo, los autores revisan de forma muy bien estructurada y con apoyo bibliográfico muy apropiado y completo el tópico de la infección por Strongyloides en el huésped inmunodeprimido en situación precaria de control inmunitario de ésta parasitosis y de cualquier otra similar con carácter oportunista. Mediante un texto muy descriptivo y una iconografía muy didáctica describen los síndromes de hiperinfestación por este geohelminto y otras complicaciones graves y amenazantes para la vida del enfermo. Hacen un recopilatorio de casos ocurridos en los últimos años y ofrecen todo el conocimiento posible sobre los antiparasitarios disponibles (mebendazol, albendazol, ivermectina) y los que están en investigación, recalcando las potenciales formas de administración de los mismos, tanto oficiales (oral, intravenosa) como más inhabituales (vía rectal, enemas). Por último, marcan consejos para realizar programas de cribado y de detección precoz en los donantes y receptores de trasplante de órganos.


Variación de la epidemiología de las fungemias y de la sensibilidad al fluconazol de los aislamientos de hemocultivos en los últimos 10 años en España: resultados del estudio FUNGEMYCA
J Pemán, E Cantón, JJ Camarena Miñana, J Alcoba Florez, J Echeverria, D Navarro Ortega, J Martínez Alarcón, D Fontanals, B Gomila Sard, B Buendía Moreno, L Torroba, J Ayats, MA Bratos Pérez, M Alvarez Fernández, F Sánchez Reus, I Fernández Natal, G Royo García, G Ezpeleta, E Martín-Mazuelos, I Iglesias, A Rezusta, I Ramírez de Ocariz, A Gómez Nieto; el Grupo de Estudio FUNGEMYCA.

Es el momento del cambio en la fungemia y la candidemia, hablando en el sentido y en el contexto más epidemiológico. Capitaneados por el Dr. J. Pemán (alma mater de esta misma página web de la Fundación Micellium), un grupo de prestigiosos micólogos españoles han conseguido reunir más de 1.300 aislamientos de hongos patógenos diseminados por vía hematógena y detectados en hemocultivos. Este amplio estudio de cepas, de centros (44 hospitales) y de duración en el tiempo (un año), el cual se ha denominado FUNGEMYCA, va a permitir comparar los cambios epidemiológicos en un sentido de trazabilidad histórica, comparando con décadas previas, así como comparaciones entre hospitales, provincias, CCAA, e incluso con uno mismo en otras épocas. La principal conclusión, con fines prácticos asistenciales, es que nada es lo que parece, todo es dinámico y sometido al cambio, y el mejor manejo de la fungemia pasa por conocer lo más detallada y refinadamente posible la propia epidemiología local. A ello, los autores acompañan los resultados de porcentajes de sensibilidad a fluconazol de estos aislamientos de hemocultivos, y sitúan las tasas de resistencia bien especificadas y precisas según los géneros y especies hallados. Este es el primer artículo de una serie de originales que el grupo Fungemyca va a ir liberando en diferentes publicaciones a lo largo de los próximos meses. Bienvenidos sean.


Strategies for reduction in duration of antibiotic use in hospitalized patients
Y Hayashi and DL Paterson

Más, más y mucho más, no siempre es mejor. No por “dar más caña” y “más tiempo” se consiguen mejorar los resultados de la antibioterapia en diferentes procesos y síndromes infecciosos. Más duración en la antibioterapia, si no es necesaria, puede pasar un precio de peaje más elevado de lo que creemos, no sólo en términos económicos, sino también ecológicos. La presión selectiva antibiótica permanente e innecesaria facilita que algunos pacientes puedan convertirse en el modelo natural “vivo” de las resistencias, aparte de otros daños colaterales a los que se pueden ver conducidos, como toxicidad e interacciones farmacológicas, sobreinfección bacteriana y/o fúngica y “agotamiento inmunológico” por los antibacterianos, como algunos invocan ahora como vocablo expresión de la “moda de turno”. Tal vez un uso más racional de los antibióticos, guiados por la experiencia clínica, el sentido común, la coherencia clínica y la introducción de biomarcadores y de otros marcadores subrogados (la procalcitonina, según los autores podría ser uno de ellos, pero no el único ni el más perfecto) podría permitir acortar duraciones extensas pero poco óptimas de algunas antibioterapias, las cuales no siempre están justificadas o a lo sumo se basan en categoría CIII de expertos. Una vez más el actual concepto de “desescalada” cobra vigor y sentido, si bien no hacemos más que volver a recordar a nuestros maestros cuando nos enseñaban diligentemente a llevar a cabo un “racional ajuste de dosis, intervalos y duración” de la antibioterapia prescrita con “sentido y sensibilidad”.

SELECCIÓN DE AGOSTO

Aquí estamos un mes más. Hoy hablaremos de buenas noticias en el pronóstico de los pacientes con aspergilosis. Para empezar algunos cotilleos. Este artículo fue escrito por una investigadora joven, potente, inteligente y, aún más importante, amiga (¡cómo me gusta poder presumir de conocer a gente como ella!). Desde Nueva Zelanda aterrizó a Seattle y os aseguro que fue uno de mis ángeles de la guardia…En fin, que me pierdo. He seleccionado este artículo porque, por primera vez, alguien nos contó que tras años de estudio estábamos haciendo las cosas bien, o como mínimo, cada vez mejor. En este artículo se confirma que aquellos pacientes con trasplante de progenitores hematopoyéticos diagnosticados de aspergilosis invasora con posterioridad al 2002 presentaban una mortalidad casi del 50% menor que los diagnosticados en años anteriores.

Esta mejoría se podía explicar por diferentes factores pero los más importantes tenían relación con los múltiples cambios en las prácticas del trasplante, entre los que cabe destacar el procedimiento no-mieloablativo o el uso de células periféricas, la mejoría en el enfoque diagnóstico de la aspergilosis, consiguiendo diagnósticos y tratamientos más precoces y el uso de voriconazol.

De hecho, este es uno de los estudios, junto con el famosos estudio aleatorizado multicéntrico publicado por Herbrecht en NEJM en el año 2002, donde voriconazol se muestra más eficaz que sus comparadores en el tratamiento de los pacientes con aspergilosis invasora. En este estudio, se debe matizar que voriconazol es un fármaco comercializado en la última década y se utiliza sobretodo en pacientes que ya se benefician de los factores nombrados con anterioridad.

En cualquier caso, buenas noticias para nosotros y nuestros pacientes, la mortalidad disminuye. Felicidades a todos por vuestros granitos de arena. En el próximo episodio…¿Ah, pero existen otros hongos que no son aspergilus?

SELECCIÓN DE JULIO

Hola de nuevo! El trasplante es un mundo apasionante. Como ejemplo os cuento una anécdota que viví con un familiar anciano que en absoluto tenía ningún contacto con el ámbito médico. Un día me preguntaba sobre mi trabajo, sobre qué hacía y qué me apasionaba. En poco me vi explicándole la importancia del sistema inmunitario y casi sin querer le dije: “si fuéramos capaces de reproducir el sistema inmunitario, todo seria más fácil…pero es tan complejo!!!! No sé si seremos capaces ni de acercarnos”. Tras su mirada profunda la respuesta se quedó clavada en mi alma: “yo creo que ninguno de nosotros se podía imaginar que algún día si tu riñón no funcionaba te lo podían sustituir por otro”. Sin palabras.

Así pues, sin más dilación, hoy hablaremos de los pacientes sometidos a trasplante. El artículo que os presento es más reciente que los anteriores y destaca el gran número de pacientes incluidos (¡642 pacientes con trasplante y aspergilosis!). Nos relata los factores asociados a mortalidad relacionada con esta infección.    La primera cifra importante a tener en mente es que hasta un total de 49% los pacientes con esta complicación infecciosa fallecen en las primeras 12 semanas.

Otro dato importante es que los factores diferirán en función de tratarse de pacientes sometidos a trasplante de progenitores hematopoyéticos o a trasplante de órgano sólido. En el primer grupo, la neutropenia, la insuficiencia renal, la insuficiencia hepática, el uso de esteroides, la aspergilosis precoz y la aspergilosis probada se relacionaron con una mayor mortalidad. En los pacientes con trasplante de órganos sólido los factores relacionados con la mortalidad fueron la insuficiencia hepática, la malnutrición y la afectación del sistema nervioso central mientras que el uso de corticoides se asoció a un mejor pronóstico.

Como dato destacado, en los dos grupos de pacientes el uso de anfotericina o caspofungina en monoterapia como tratamiento de elección se relacionó con una mayor mortalidad. Un dato importante es que, a pesar que un 28% de los pacientes son tratados inicialmente con tratamiento combinado, no se observa ningún beneficio en el pronóstico al compararlo con los pacientes tratados con monoterapia.

Como aprendizajes de este estudio nos quedamos con el hecho de que existen múltiples factores asociados a mortalidad en los pacientes trasplantados que padecen aspergilosis invasora. ¡Conocer estos factores es el primer paso para intentar modificarlos!

Próximamente: “Pero después de tanto tiempo estudiando, ¿hemos sido capaces de mejorar el pronóstico de los pacientes con aspergilosis?”

Aquí os dejo el enlace: